LA RATA

También hay personas así.

Espero que os guste.

Un beso con achuchón

Imagen tomada de internet

 ¡Siempre me estáis estorbando!

Dijo la rata enfadada

y los ratones se fueron

con la cabeza agachada.

¡Qué jaleo estáis armando!

Otro día no vengáis

y si acaso uno por uno.

¡Mucho mejor si avisáis!

Así todos los amigos

dejaron de visitarla,

nunca más fueron a verla

y llegaron a olvidarla.

Cuento registrado en el Registro de la Propidad Intelectual

EL RATÓN VACILÓN

Con la poesía podemos inventar historias muy divertidas.

Espero que os guste.

Un beso con achuchón.

Imagen tomada de internet

Hay un ratón en mi casa

que siempre me toma el pelo,

se sube por las paredes

y pasea por el suelo.

He puesto una ratonera

para cazar al ratón,

con un trocito de queso

dulce membrillo y jamón.

Pero cuando me despierto

todo el queso se ha comido,

no ha dejado ni una miga

el ratoncito bandido.

Miro detrás de las puertas

dentro de la lavadora,

pero el ratón vacilón

no se deja ver ahora.

Si por él pregunto al gato

no contesta confundido,

pero si pregunto al perro

me mira muy divertido.

Como pasea a sus anchas

y no lo puedo cazar,

he gritado, sin remedio:

¡aquí te puedes quedar!

Ahora sale y entra alegre

siempre que le viene en gana,

es uno más de la casa,

¡míralo, está en la ventana!

 

Cuento registrado en el Registro de la Propiedad Intelectual

LA AMISTAD DE LA GATA Y EL RATÓN

La amistad es la  relación de afecto, simpatía y confianza que se establece entre personas que no son familia.

La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido. Rabindranath Tagore (1861-1941) Filósofo y escritor.

Espero que os guste.

Un beso con achuchón.

 

Imagen tomada de internet

Una gata bonachona

era amiga de un ratón,

para jugar cada día

quedaban en un rincón.

Lo llevaba de paseo

feliz entre las orejas,

y alrededor sus amigos

empezaron con las quejas.

«Sois un gato y un ratón

no deberíais estar juntos»,

y los dos animalitos

escuchaban con disgusto.

« ¿Por qué queréis jugar juntos?,

sois un ratón y una gata»,

cada momento del día,

les daban todos la lata.

Cansados los dos amigos

un día a todos dijeron,

que los dejaran tranquilos

con su amistad y sus juegos.

Y sin hacer caso a nadie

la gatita y el ratón,

como siempre se citaron

a jugar en el rincón.

  Cuento registrado en el Registro de la Propiedad Intelectual