Juego comprensión
lectora
Para que los niños comprendan bien un cuento lo mejor
es escenificarlo (elegiremos uno siempre de acuerdo a su edad)
He elegido una de mis poesías infantiles titulada “El conejito que quería jugar”
EL CONEJITO QUE QUERÍA JUGAR
Tres
conejos aburridos
estaban
en la pradera,
y
un conejo blanco y grande
se
acercó por la ladera.
El primero era muy gordo
el segundo muy delgado
el tercero pequeñito
con
el pelaje azulado
¿Vienes
a jugar conmigo?
Dijo
el conejo al más gordo,
y
el otro al ver su color,
sin
responder se hizo el sordo.
¿Quieres
que juguemos juntos?
Preguntó
luego al delgado,
y
el otro al ver su tamaño
saltó
pronto hasta otro lado
¿Quieres
venir a jugar?
Preguntó
al tercer conejo
¡Claro
que sí! dijo alegre.
Y
jugaron sin complejos.
Los
otros dos se miraron
y
aunque querían jugar,
alejándose
uno de otro
se
aburrieron mucho más.
Haremos unas pegatinas de cuatro conejos con las características físicas dadas. Ellos mismos elegirán su
pegatina (tapada) sin que puedan ver el personaje elegido hasta después de leer
el poema. En caso de que el número de niños sea mayor, o queramos realizar el
juego en el aula, haremos grupos de cuatro y habrá pegatinas para todos. Si el
número de niños fuera impar, uno hará de narrador. Siempre elegiremos un juego
en el que forzosamente se necesiten más de dos niños para poder jugar. Muy
importante es tener los dibujos de nuestros cuatro conejitos expuestos en algún
lugar visible para que los niños no se equivoquen a la hora de buscar al
compañero de juego.
Pegaremos sus correspondientes pegatinas en la
frente, de tal manera que el niño vea las del resto pero no la suya. Después
les diremos que todos pueden empezar a jugar al corro de las patatas, pero
nadie lo hará con el conejo blanco,
de tal modo que el niño que tenga ese personaje se sentirá excluido por los
demás del juego Seguidamente no podrán jugar con el conejo gordo, pero sí con todos los demás. Después no podrán jugar
con el conejo delgado, pero sí entre
los demás. Después no podrán jugar los conejos entre sí, con lo que al ser
todos conejos, ninguno de ellos podrá jugar. Para terminar jugarán todos los conejos, con independencia de
su aspecto físico, con lo que todos estarán integrados en el juego y se divertirán saltando al corro.
A continuación procederemos a leer la poesía,
indicándoles que deberán prestar atención porque les puede tocar escenificar
cualquier personaje.
Escenificaremos la
poesía infantil y cada niño representará su personaje.
Después de jugar al
corro y leer el poema podemos hacer actividades del tipo siguiente:
El cuento se titula.
a. El conejito que saltaba
b. El conejito blanco
c. El conejito que quería jugar
¿Cuántos conejos hay en este poema?
a. 2 conejos
b. 3 conejos
c. 4 conejos
¿Quieres venir a jugar?, lo dice
a. El conejo gordo
b. El conejo delgado
c. El conejo blanco
El conejo blanco además es
a.-Pequeño
b. Gordo
c. Grande
¿Cómo crees que se siente el conejo
blanco cuando los demás conejos no quieren jugar con él?
a. Contento
b. Hambriento
c. Triste
Para terminar podemos
seguir con preguntas:
¿Qué conejito te hubiera
gustado representar?
¿Te has sentido bien con tu personaje?
¿Cambiarias algo de esta
historia? ¿Por qué?
¿Es mejor aburrirse o
jugar?
¿Qué conejitos crees que
se lo pasaron mejor?
Animaremos a los niños a
hacerse preguntas y darse respuestas entre ellos. Pueden terminar por colorear
los conejos según las características físicas dadas.
Con este tipo de
actividades haremos mucho más fácil que los niños comprendan el mensaje.