Cualquiera puede tener un accidente.
Espero que os guste.
Un beso con achuchón.
Imágenes tomadas de internet |
Una
cebra y un ratón
pasean
por un camino,
disfrutando
del paisaje
van
admirando los pinos.
En un
cruce por azar
en un
momento se encuentran,
la
cebra pisa al ratón
que al
momento se lamenta.
«Perdóname
ratoncito»
—dice
la cebra angustiada—,
solo ha
sido un accidente,
no
quería hacerte nada.
El
ratoncito en el suelo
gime
con mucho dolor,
se
queja de una patita
y
necesita un bastón.
La
cebra en busca de ayuda
llama a
su amiga jirafa,
que de
la copa de un árbol
una
corta rama alcanza.
Con habilidad
la cebra
hace
una fuerte muleta,
y el
ratón al levantarse
su
cuerpo en ella sujeta.
«Agradezco
tus cuidados
—dice
el ratón malherido—
sé que no quisiste herirme,
has
hecho cuánto has podido»
Y andando
por el camino
se va
el ratoncito cojo,
y la
cebra entristecida
va
mirando de reojo.
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