Concienciar
a nuestros hijos para que sean respetuosos con el medio ambiente es una
tarea que empieza desde que son muy pequeños. La mejor forma de educarles de
forma natural, sin duda, es dando ejemplo.
Espero que
os guste.
Un beso con
achuchón.
En la acera de la calle
había una papelera,
que se quejaba a la gente
por echar papeles fuera.
Primero pasó una niña
comiendo una golosina,
y al tirar el envoltorio
tocó fuerte una bocina.
La niña miró asustada
y enseguida comprendió,
mirando a la papelera
recogió lo que tiró.
Una señora elegante
que iba comiendo un pastel,
aunque pasó por su lado
al suelo tiró el papel.
Al verlo la papelera
tocó otra vez la bocina,
y esta vez muy enfadada
gritó en voz alta ¡Cochina!
Cuento registrado en el Registro de la Propiedad Intelectual.
Está genial esta papelera con voz. Yo quiero una, Marisa, jejeje.
ResponderEliminarBiquiños.
jajaja muchas gracias Anabel.
EliminarBiquiños
Mola esta papelera resulta ser respondona y amante de la buenas formas. Seguiré aprendiendo
ResponderEliminarEso es María,jajaja
Eliminar¡Muchísimas gracias por tu visita!
Un abrazo
esa papelera es muy buena no le gusta que dañen el medio ambiente
Eliminar¡Exactamente! Tenemos que cuidar nuestro planeta empezando por los pequeños detalles.
Eliminar¡Gracias!
Me ha gustado mucho Marisa, que mejor manera que educar a los hijos desde pequeñitos con poemas como este, gran forma de aprendizaje.
ResponderEliminarLa educación empieza en casa.
EliminarMuchas gracias por el comentario.
Un abrazo.
Una preciosidad de poesía, Marisa y además nos vendrá fenomenal para motivarlos para que utilicen las papeleras tanto en el cole como por la calle. Un abrazo.
ResponderEliminarMe alegro de que te sirva de ayuda.
Eliminar¡Muchas gracias Ana!
Un bico forte.
s
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